jueves, 25 de agosto de 2011

Llega el invierno.

Déficit cero. La panacea. Gasto lo mismo que ingreso. ¿Y qué ingreso?, o de otra forma, ¿de dónde obtengo mis ingresos? La mayor parte, de los tributos, impuestos, tasas y contribuciones especiales, aunque el grueso se encuentra en los impuestos, véase el Impuesto sobre la Renta (IRPF), el Impuesto de Sociedades (IS), que gravan los beneficios obtenidos por personas y empresas, sin olvidar el IVA que se recauda por el consumo. En épocas de bonanza, como la vivida hasta el 2007, no existía ningún problema. El Estado recaudaba como lluvia caída del cielo.

Y vamos con los gastos. Sanidad, Educación, Pensiones, Infraestructuras,…, todo con mayúsculas y que compone el denominado Estado de Bienestar. En épocas de bonanza se hacía frente a todo ello sin ningún problema.

Pero, ¡Ay!, llegó el invierno. Los ingresos cayeron de manera abrupta. La economía, sin previo aviso (es un decir) echó el freno y, de repente, nos encontramos con un problema. Caída de recaudación vía impuestos. Miles de trabajadores son enviados a su casa, por lo que la recaudación por el IRPF desciende. Las empresas ven caer sus beneficios, por lo que la recaudación por el IS desciende. Al no existir ingresos y, sobre todo, al existir incertidumbre, el consumo y la inversión se resienten. La recaudación por IVA se resiente. ¿Y los gastos? Aumentan. A los ya existentes en sanidad, educación, etcétera, etcétera, tenemos que sumar aquellos que surgen como consecuencia de la activación de las medidas tendentes a paliar la situación: prestaciones por desempleo, pensiones,…, sin olvidar los gastos de los diferentes planes (Plan E) para evitar males mayores.

¿Gastamos sólo lo que ingresamos? Déficit cero. Consecuencia: adelgazar el sistema de bienestar ante la incapacidad de hacer frente a los gastos que genera, o lo que es lo mismo, dar entrada al sector privado, llevar al mercado servicios públicos. Algunos son partidarios de esta manera de actuar, en aras de una mayor eficiencia, competitividad, productividad,… pero, si mal no recuerdo, ¿en qué hospitales fueron intervenidos Su Majestad y la Presidenta de la Comunidad de Madrid? Por poner un ejemplo.

2 comentarios:

agremon dijo...

Despiste 'impedoable': os gastos para sanar institucións bancarias (aínda que sexa sen comentario extra)

J. A. Bolaño dijo...

Por suposto. Digamos que van incorporados en (...).