A veces me pregunto, y creo que
como yo otros muchos, por qué aquéllos que tienen en sus manos detener,
obstaculizar, parar, incluso simplemente denunciar determinadas actuaciones de
los más poderosos no lo hacen y dejan que caigan sobre ellos las acusaciones de
irresponsabilidad, de connivencia con el poder. La pregunta es, dónde están los
profesionales de primer nivel, los intelectuales, los académicos,... ante la
cantidad de hechos presuntamente delictivos o fraudulentos que se cometen en
nuestro país. Por qué no se les escucha, dónde está su sentido de la
responsabilidad.
Por eso uno se alegra cuando lee
noticias como "ésta".
No porque se haya destituido a
una persona de su cargo sino por lo que subyace tras su actuación y el apoyo de
sus compañeros. Ante lo que parecen injerencias políticas, en un acto de
responsabilidad y solidaridad, dimite el Jefe de la dependencia de grandes
contribuyentes de la Agencia Tributaria.
Esperemos que este hecho no quede
en una simple anécdota y sirva para despertar el sentido de responsabilidad de
muchos.
Por qué tristemente la Agencia
Tributaria también ha sido noticia recientemente y, al menos yo, no he podido
verlo en los principales medios de comunicación. El Consejo de Defensa del
Contribuyente, integrado en el propio Ministerio de Hacienda, ha emitido su
memoria anual. Según este informe las nuevas normas que el ministerio de
Hacienda está aprobando “ponen en peligro, o al menos en riesgo de colisión,
los derechos del contribuyente”. En algunos casos “las medidas no respetan los
derechos del contribuyente”. Algunas de esas medidas permiten a la Agencia
Tributaria embargar “cuantías mayores a las debidas”, utilizar argucias para
evitar la “prescripción”, y muchas se están aprobando “a escondidas” en
“disposiciones adicionales de normas reguladoras de cuestiones específicas que
quedan lejos de respetar el principio de seguridad jurídica”.
Según el Defensor del
contribuyente, la Agencia Tributaria (véase el ministerio de Hacienda) está
inclinando la balanza “a favor de la lucha contra el fraude en perjuicio de la
seguridad jurídica”, una actitud “más que cuestionable” que está llevando a
“suprimir principios básicos del orden tributario”.
Si unimos ambos hechos, la
dimisión del Jefe de la dependencia de grandes contribuyentes y la destitución
de la inspectora junto con el informe del defensor del contribuyente, podemos
obtener una conclusión, la lucha contra el fraude parece centrarse en los de
siempre, quizás porque sea más fácil y rápido recaudar para cumplir objetivos
(por ejemplo de déficit).
Y no estoy insinuando que deba
dejarse al margen a los pequeños contribuyentes. Para evitar suspicacias.
1 comentario:
Hacienda no soy yo, hacienda no eres tu, ...
Pero también:
Hacienda no fui yo, hacienda no fuiste tu, ...
Y, posiblemente,
Hacienda no seré yo, hacienda no serás tú ...
y
Hacienda la sufriré yo, hacienda la sufrirás tú, ... pero hacenda no la sufrirán ellos.
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