domingo, 6 de febrero de 2011

Lujo.

Hay noticias que no dejarán de sorprenderme por muy habitual que puedan ser en los medios de comunicación. Mientras que día tras día te levantas y escuchas los problemas que acucian a millones de personas para conseguir un empleo, una vivienda, una miserable pensión, una cobertura por desempleo, unos servicios cada vez más paupérrimos, …, en algún lugar próximo se encuentra una capa social que vive al margen de todos estos problemas.

20.320 millones de euros de cifra de negocios. 3.032 millones de euros de beneficios. Cifras que en el contexto actual parecen insultantes, que provocan vértigo si uno se para un momento y toma conciencia de lo que significan. Cuando en toda Europa y EEUU se buscan fórmulas para salir de una de las mayores crisis de todos los tiempos, hay quien es capaz de darle la espalda a esta realidad. Como ejemplo, el grupo de empresas Louis Vuitton (Louis Vuitton, Dior, Loewe, …). El lujo no entiende de crisis.

Teníamos la sensación de que el dinero había desaparecido de la noche a la mañana, que se encontraba en esos terribles monstruos llamados bancos, que no estaban dispuestos a que fluyera por todo el sistema. Al parecer, no es que haya desaparecido sino que se encuentra polarizado en unas pocas manos (o no tan pocas). Record de ventas en 2010, en plena crisis. ¿Saben quiénes son actualmente los compradores? No podía ser de otra forma, los compradores chinos se dejan en los exclusivos almacenes británicos Harrods la nada despreciable cantidad de 3.000 euros de media en sus visitas (cada comprador, por supuesto). Simplemente, capitalismo.

1 comentario:

Beni dijo...

¡Su puta "madle"!.
Así é comunista "calquela"...