jueves, 13 de enero de 2011

Un poco de todo.

Si antes fueron los daneses (Saxo bank) ahora les toca el turno a los suizos. La entidad UBS calcula que será necesaria una “nueva subida de impuestos” para cumplir con el objetivo de reducción del déficit previsto para el 2011 en nuestro país. Además se atreve y propone que los impuestos a subir serán aquellos que gravan los hidrocarburos. No contentos con esto, pronostican un crecimiento menor del PIB español; las consecuencias: una menor recaudación y por lo tanto habrá que reducir gastos presupuestarios (“paralización masiva de obra pública”). Ya ven, y todo para contentar a los defensores del déficit cero, del equilibrio presupuestario. Otro ejemplo de cómo no debería estimularse la economía.

Por suerte, y siendo positivos, podemos ver en prensa noticias que nos dan ciertas esperanzas para un cambio de rumbo: importante crecimiento del PIB alemán, compra de deuda pública europea por parte de Japón, colocación en el mercado de deuda pública portuguesa a menores tipos de los previstos, fuertes subidas de las bolsas europeas (nuestro IBEX 35 subió ayer un 5,42%), … Claro que cuando lean esto puede que las noticias ya no sean tan favorables; es la economía.



Por otra parte, leo que los trabajadores de Nissan en la planta de Barcelona han aceptado ajustar su situación laboral (una vez más los sacrificios los hacen los trabajadores) mediante una congelación salarial y un aumento del tiempo efectivo de trabajo, y todo para convencer a los “directivos” de la matriz japonesa para que no trasladen la fabricación de un nuevo modelo de furgoneta a otras latitudes; altos costes, son los argumentos para el traslado. ¿Serán suficientes estos sacrificios por parte de los trabajadores? Y lo más importante, ¿congelarán los directivos sus bonus?

1 comentario:

Beni dijo...

Boas.
Só agardemos non estar nadando (a contracorrente) para rematar morrendo na beira...
Tanto sacrificio, tanta medida antipopular (calquera non se queixa), tanto compromiso -case que sumisión- coas actuais necesidades da nai Europa, ¿acabará por traer resultados?. Por outra banda, ¿estamos todos arrimando o ombreiro ó mesmo nivel?.
Rabia, é o menos que ún pode sentir cando se lembra das orixes da tan traída e levada crise e, por riba diso, daqueles que son os verdadeiros damnificados de todo isto.
Apertas.