viernes, 23 de diciembre de 2011

Nuevo estado.

Enhorabuena, usted es cada día más rico. Les doy la bienvenida a su nueva situación de hombres y mujeres adinerados. No porque hayan sido agraciados con la lotería de navidad (alguno puede que sí), el motivo es otro.

Se ha impuesto el concepto de austeridad. Miren a donde miren, lean lo que lean, la austeridad se ha filtrado en sus vidas, lo quieran o no. ¿Las virtudes? Todavía están por verse.

Pero si hacemos caso al dicho popular de que no es más rico el que más tiene sino el que menos necesita pues, acostúmbrense a ser ricos.



FELICES FIESTAS en su nuevo estado. Y mucha salud.



viernes, 2 de diciembre de 2011

A negociar.

Negociación colectiva con prevalencia de los convenios o acuerdos de empresa. Uno de los puntos que el nuevo Gobierno tiene en mente para reformar la legislación laboral. Un tema del que he hablado alguna vez en estas páginas. Un requerimiento que es solicitado de manera insistente desde la patronal y desde ciertas instituciones.

Como sabrán, la mayor parte de las revisiones salariales de los trabajadores están indiciadas a la inflación prevista, por lo que al final de año nuestras nóminas vienen siendo actualizadas, la mayor parte de las veces, en función del encarecimiento del coste de la vida. Esto ha dado pie a muchas críticas desde ciertos sectores argumentando que los salarios aumentan más que la productividad (otro tema que ya hemos comentado) y, por lo tanto, nuestra competitividad se ve resentida. Es decir, nuestros productos y servicios son más caros al incorporar un coste salarial extra, por lo que son sustituidos por productos importados.

La solución pasa por negociar los salarios y sus complementos a nivel de empresa, muchas veces vinculados a la productividad. Este hecho no debería ser un gran problema a nivel de las grandes empresas, donde se dispone de las herramientas necesarias para obtener multitud de indicadores. ¿Pero a nivel de PYMES? Les recuerdo que el 95% de empresas en este país son medianas o pequeñas. Echen un vistazo a su alrededor y comprueben cuántas multinacionales pueden ver.

¿Se imaginan la negociación entre un empresario y sus, digamos, cuatro trabajadores? Tras más de 20 años en contacto directo con empresas y trabajadores, yo me hago una idea.

Una anécdota, podrían ser muchas más, pero ésta es reciente. Un empresario acude al despacho con la intención de liquidar sus impuestos trimestrales. Entre la documentación que aporta se encuentran las facturas de gastos (compras, electricidad, gasóleo, nóminas de los trabajadores, …). ¿Y las facturas emitidas, los ingresos? No las hizo. Me comenta que antes de emitir las facturas de ingresos tiene que cubrir sus gastos para poder vivir, después, una vez cubiertos, emitirá las facturas. Ni que decir tiene que estamos ante un ejemplo claro de economía sumergida, con el consiguiente fraude. Pregunta: ¿cuándo verá este empresario cubiertos sus gastos? ¿Dónde está su límite? ¿Incluirá entre sus gastos necesarios un coche, unas vacaciones, restaurantes, ropa,…?

Otros también me comentaron en su momento que no ganaban nada con su negocio. Tenían hijos universitarios y eso suponía un elevado gasto. Claro ejemplo de confusión entre beneficio empresarial y economía familiar.

No se crean, también tengo anécdotas de trabajadores, pero en otro momento.

En definitiva, ya conocemos lo que nos espera: negociación a nivel de empresa. Suerte.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Una lectura.

Hoy toca recomendar un libro. Todavía no lo he leído, pero la reseña es más que significativa.

“Soy economista y os pido disculpas”.
Florence Noiville
Edita: Deusto - 96 Páginas – 2011

La autora es licenciada en una de las escuelas de negocio más prestigiosas del mundo, desempeñaba un cargo de responsabilidad en una gran multinacional, pero decidió cambiar de oficio. ¿El motivo? No estaba de acuerdo con el sistema neoliberal que ella misma estaba ayudando a alimentar con su trabajo y al que considera culpable de la crisis actual. Escritora y economista, señala con el dedo a las todopoderosas escuelas de negocio y critica su sistema de enseñanza, responsables, según ella, de proporcionar una formación basada en unos valores que, como se ha demostrado, sólo incrementan la desigualdad entre ricos y pobres. Un libro que denuncia la incapacidad de las élites para evitar la crisis.

Y un apunte para la historia, para que quede constancia por escrito. Día 30 de noviembre de 2011. Tras meses, años, llevando a cabo medidas contradictorias, medidas de restricción del crédito, medidas que ahogaban la financiación de las empresas y particulares, basadas en el dogma de la austeridad, ayer se ha puesto, iba a decir la primera piedra, pero ésta se ha puesto con la reciente bajada de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo, así que digamos que se ha dado un paso más, e importante, para inundar de liquidez a las entidades financieras (otra cosa es que se filtre a la economía). La acción coordinada de los principales bancos centrales (Europeo, Canada, Inglaterra, Japón, Reserva Federal de EEUU y el de Suiza) para facilitar y abaratar la financiación en dólares.

Como consecuencia inmediata, fiesta en las bolsas, caída de la prima de riesgo y subida del tipo de cambio Euro/dólar. Eso ayer, hoy volvemos a la realidad. Vuelven las preguntas, las dudas, las incertidumbres.